¿Qué se puede considerar un producto gourmet?

Desde hace un tiempo, la palabra gourmet ha empezado a utilizarse con demasiada ligereza. De hecho, en muchas ocasiones se emplea para hacer referencia a productos que realmente no deberían considerarse como tal.

¿Sabes cuando podemos atribuir la propiedad de gourmet a un producto? ¿Qué condiciones debe cumplir un alimento para que entre en la valorada categoría gourmet? Te lo contamos a continuación.

El origen de la palabra gourmet

Comencemos por conocer realmente qué significa esta palabra y cuál es su origen.

Para la Real Academia de la Lengua Española, gourmet tiene dos acepciones:

– persona de gustos exquisitos en lo relativo a la comida y la bebida.

– relativo a un plato gourmet.

La palabra gourmet proviene del francés y como sustantivo es de uso común para referirse a todas aquellas personas expertas en gastronomía o aficionada a las comidas exquisitas. Por extensión, los productos gourmet están asociados a lo más excelso y excelente de la cocina, ya sea un alimento por su calidad o un plato elaborado por la selección de ingredientes y la forma de prepararlo.

Características de los productos gourmet

Obviamente, cuando hablamos de las propiedades de los productos gourmet, la calidad es la primera que tenemos que destacar ya que prima por encima del resto.

Esa calidad tiene que ver bien con el origen de un alimento o bien con la exquisita selección de la materia prima, el cuidado en la elaboración y el detallismo en la presentación cuando se trata de un producto elaborado.

Además de esta calidad, un producto gourmet destaca por:

1.- Propiedades organolépticas

Sea un alimento, sea un producto o plato elaborado, en la categoría gourmet solo tienen cabida aquella comida o bebida cuyas propiedades naturales no han sido alteradas. En el caso de un producto elaborado como puede ser un embutido debe estar hecho exclusivamente a partir de ingredientes naturales.

2.- Rigurosa selección de ingredientes

Otra de las características de los productos gourmet es que se hayan creado tras una rigurosa y exhaustiva selección de ingredientes realizada por personal especializado, además de seguir procesos naturales y artesanales para su posterior elaboración.

3.- Empaquetado o presentación

La apariencia de los alimentos y de los productos gourmet también responde a unos estándares de calidad en los que prima tanto la imagen que se proyecta pero sobre todo la higiene y el tratamiento tan exquisito que se da al artículo para que llegue en perfecto estado y conservando todas sus propiedades a su destino final.

4.- Puntos de venta

Los alimentos o los productos considerados gourmet no se encuentran en puntos de venta ordinarios como puede ser un supermercado, salvo que este tenga una sección especial dedicada a este tipo de artículos.

Existen tiendas físicas dedicadas en exclusiva a la venta de este tipo de productos al margen de esas secciones gourmet de supermercados y centros comerciales a las que hacíamos referencia. Aunque con el auge de las nuevas tecnologías y la comodidad de comprar desde casa, ahora esos artículos pueden adquirirse en una tienda gourmet online en la que puedes encontrar embutidos, conservas, quesos, aceites, vinos… Hoy en día, estas tiendas presentan una oferta muy completa a unos precios muy competitivos y con todas las garantías de calidad que exige una persona que se decanta por este tipo de productos.

 

¿Eres un sibarita al que le encanta comprar productos gourmet? Pues presta siempre atención al etiquetado antes de adquirir uno así como al punto de venta, ya que se trata de dos de las vías más efectivas para reconocer un verdadero producto gourmet que cumple con los estándares de calidad deben tener este tipo de productos.

Y no olvides que si se trata de productos elaborados como embutidos o quesos, estos siempre se elaboran de manera artesanal a partir de una materia prima única, seleccionada con sumo celo para conseguir un resultado final supremo.